Sobre la revolución cubana

SÍNTESIS HISTÓRICA

La Revolución Cubana es continuadora de la tradición de lucha del pueblo cubano. Para lograr este destino histórico fueron innumerables los obstáculos que tuvo de enfrentar la isla desde el siglo pasado.

Cuba, junto a Puerto Rico, fue la última colonia de España en América Latina, y se caracterizaba por ser un país de plantaciones azucareras explotadas con mano de obra esclava.

La sociedad esclavista cubana, era fuertemente apoyada por los estados esclavistas del sur de Norteamérica, en su pugna de intereses con los estados industriales del norte. Los primeros contaban con que Cuba se convirtiera en un estado esclavista más de la Unión.

El propósito de anexarse a la isla, fue siempre una fuerte aspiración de los dirigentes de Estados Unidos, desde los inicios mismos de esa República, expresada en reiteradas ocasiones por distintos gobernantes y hombres públicos, que han considerado históricamente a Latinoamérica y en especial a Cuba, como su traspatio.

En 1868 se inició la guerra de independencia, liderada por patriotas cubanos que procedían de familias ricas, poseedoras de cultura política, relaciones, y recursos económicos. Sin embargo, la propia guerra arrastró a campesinos, artesanos y esclavos, estimulando el patriotismo en las masas de estudiantes, profesionales e intelectuales y en la población en general. El sentimiento nacional se hizo realidad concreta e irreversible en el propio fragor de la lucha contra el dominio de España.

Esta contienda que duró diez años, no logró la independencia. España, era una fuerte potencia, y aunque hubo desgaste de ambas partes, las enfermedades, los problemas organizativos y de dirección, sobre todo en la parte cubana, junto a situaciones de caudillismo, regionalismo y la falta de unidad en algunos frentes, contribuyeron a que no se lograra la victoria definitiva.

En estas condiciones se produjo el Pacto del Zanjón, que debilitaba la capacidad de lucha frente la metrópoli y constituía una claudicación por parte de algunos jefes, que agotados, confundidos y divididos, habían decidido un cese al fuego y una paz sin independencia.

Este hecho no obstante, tuvo una respuesta valiente y digna, las voces de varios patriotas liderados por Antonio Maceo de alzaron en la histórica Protesta de Baraguá, que se convirtió en símbolo de intransigencia revolucionaria y demostró la voluntad de continuar la lucha hasta lograr la verdadera independencia.

En 1879 estalló la Guerra Chiquita, que demostró que en los cubanos se mantenía el espíritu de lucha para lograr la independencia, pero las condiciones del momento eran muy desfavorables, las fuerzas estaban diezmadas, divididas, y era imprescindible la unidad de acción frente a un enemigo aún poderoso.

En 1886 se produjo la abolición de la esclavitud, consecuencia inevitable de la Guerra de los Diez Años y de otros factores externos que también influyeron.

En 1895, después de una ardua labor política y un largo proceso organizativo, bajo la guía de José Martí y el Partido Revolucionario Cubano por él fundado, se inició la nueva epopeya libertadora, la Guerra de independencia. Se debe señalar que por primera vez en la historia se había creado un partido para dirigir una contienda independentista.

En ese entonces, España continuaba siendo una de las principales potencias militares de Europa.

Esta vez la guerra estuvo encabezada desde el principio por representantes de capas humildes de la sociedad que habían ganado un prestigio indiscutible en el fragor de las batallas, tal es caso de Antonio Maceo, «El Titán de Bronce» quien junto al «Generalísimo» Máximo Gómez y un conjunto de nuevas generaciones de campesinos, obreros, artesanos e intelectuales, protagonizarían esta nueva gesta libertaria, que lograría extenderse por toda la isla con la indiscutible hazaña militar que constituyó la Invasión de Oriente hacia Occidente.

En 1898, España estaba exhausta, sin recursos ni energía para continuar la guerra. Los patriotas cubanos fueron dominando todo el campo y las comunicaciones interiores, la invasión hacia occidente había logrado su objetivo. Prestigiosos generales españoles habían sido derrotados a lo largo de esa contienda.

Fue precisamente a partir de ese momento en 1898, que se produjo la intervención militar norteamericana, después de haber intentado con España, en reiteradas ocasiones, la compra del territorio de Cuba. La explosión del Acorazado Maine, anclado en el Puerto de La Habana, fue el pretexto para la declaración de guerra por Estados Unidos.

La llamada Guerra Hispano-Cubano-Norteamericana, desde el principio tuvo para Estados Unidos el objetivo de apoderarse del territorio cubano, pero este no pudo lograrse como lo habían previsto, (con la anexión de la isla al vecino del norte), debido a que la lucha del pueblo cubano, había tenido una amplia repercusión en el ámbito mundial, y había despertado interés hasta en el propio territorio estadounidense.

La fórmula aplicada entonces por el Gobierno de EEUU., al no poderse anexar Cuba, fue la de concederle una independencia formal, mediatizada, el 20 de mayo de 1902, con un presidente entreguista, Tomás Estrada Palma, conocido por sus posiciones anexionistas, que respondía a los intereses norteamericanos.

Como consecuencia de ello surgieron en el país, las bases navales norteamericanas, y el apéndice constitucional denominado: Enmienda Platt, que entre otras cosas, daba a Estados Unidos el derecho a intervenir en Cuba, siempre que lo estimara conveniente.

Las inversiones de Estados Unidos en Cuba, que en 1896 ascendían a 50 millones de dólares, se elevaron a 160 en 1906, a 205 en 1911 y a 1200 en 1923, e incluían la propiedad de las tres cuartas partas de la industria azucarera.

La economía creció deformada y casi en absoluta dependencia de los intereses norteamericanos. El país se fue convirtiendo en un suministrador de azúcar a bajos precios, y en un mercado para los excedentes financieros y la producción agrícola e industrial de Estados Unidos.

La República mediatizada reeditó bajo formas nuevas la esclavitud ya abolida desde el 1886. Comenzó la inmigración de haitianos y jamaicanos.

La corrupción en su máxima expresión, se estableció como práctica en la administración pública. Los fondos que se debían invertir para obras públicas, educación y salud, eran malversados por el aparato administrativo, el Parlamento y el Poder Judicial, estos existían únicamente, para servir los intereses de los monopolistas yanquis y burgueses. La discriminación racial, la prostitución y el juego, florecieron en esa etapa.

La política exterior de Cuba se fraguaba en Washington, y las crisis económicas capitalistas influían en el país con una gran fuerza, debido a que los Estados Unidos hacían recaer sobre Cuba sus efectos devastadores.

En la década del 30, durante la tiranía machadista, la clase obrera dirigida por los comunistas, jugó un papel significativo en la lucha contra los males sociales y la dictadura de Gerardo Machado.

En agosto de 1933 fue derrocado el gobierno de Machado por el empuje de la huelga general revolucionaria.

Pero la Revolución del 30 se frustró con la intervención del Gobierno de Estados Unidos, mediante la llamada «Mediación» y la presencia de acorazados en las cercanías de Cuba. Producto de esa intervención, surgió un gobierno confuso. El descontento llegó a los cuarteles y el 4 de septiembre se produjo la sublevación de sargentos y soldados, del cual surgieron figuras como Fulgencio Batista Zaldívar

Se constituyó un gobierno provisional, de corte nacionalista con la activa participación de Antonio Guiteras como ministro de Gobernación de tendencia antimperialista. Comenzaron a instrumentarse algunas medidas progresistas, bajo amenazas y presiones de la máquina de guerra yanqui.

Con la complicidad de las clases reaccionarias y la traición y el deshonor de Fulgencio Batista, se frustró el proceso revolucionario, siendo aplastado con sangre y fuego.

En marzo de 1935 fue reprimida brutalmente la huelga general revolucionaria, y en mayo de ese mismo año, con el asesinato de Antonio Guiteras, se eliminó el último vestigio de resistencia armada.

Esta etapa de efervescencia revolucionaria, contribuyó a que fuera abolida la Enmienda Platt, ante el empuje de las masas populares. No obstante, se produjo una época de confusión, de incertidumbre. La economía mundial se iba recuperando gradualmente y el poder de Batista, se iba consolidando.

La división de las fuerzas revolucionarias que se produjo a partir de 1933, posibilitó la maniobra de los sectores más reaccionarios.

En el ámbito internacional, creció la contradicción entre el imperialismo norteamericano y la Alemania hitleriana, la poderosa corriente antifascista mundial y la política de los frentes populares, promovió algunas alianzas tácticas con la izquierda, sin que el régimen disminuyera su carácter inminentemente castrense, burgués y pro imperialista.

En 1939 estalló la II Guerra Mundial. Los regímenes burgueses de Europa fueron incapaces de resistir. Sus ejércitos se rindieron ante las hordas hitlerianas y su enorme potencial industrial y su población, quedó en manos de los agresores. Sin embargo, el pueblo soviético resistió y enfrentó heroicamente el fascismo.

Cambió la correlación de fuerzas, nació el campo socialista y se abrió paso el movimiento revolucionario mundial, a partir de esa coyuntura histórica se liberaron del coloniaje decenas de países de Asia y África.

Estados Unidos, que había concluido la contienda con su poder industrial intacto, se constituyó en el baluarte de la reacción mundial, asumiendo el papel de gendarme internacional, e iniciándose una amplia política de alianzas militares contra el campo socialista que desató la carrera armamentista.

En 1944 triunfó la oposición a Batista, asumiendo la presidencia Ramón Grau San Martín, quien después de una elección en que había obtenido amplia mayoría, puso en práctica una política reaccionaria, y a partir del año 1946 se enfrentó a la dirección del movimiento sindical.

Este período coincidió con la guerra fría y el anticomunismo adquirió una virulencia inusitada.

En la administración pública, donde las recaudaciones habían aumentado por los precios relativamente altos del azúcar, el robo, la corrupción y la malversación, adquirieron cifras significativas.

En esta etapa surgió un movimiento de carácter cívico-político, dirigido por Eduardo Chivás, que capitalizó una gran parte del descontento nacional y arrastró a diferentes sectores del pueblo.

La democracia representativa y el parlamentarismo burgués demostraron ser incapaces de resolver los graves problemas del país, era necesario un movimiento de masas fuerte, que revirtiera la llamada República mediatizada.

Chivás muere el 16 de agosto de 1951, y el movimiento político fundado por él, que contó con gran apoyo popular, más tarde contribuiría en la lucha contra la tiranía batistiana.

La gran masa revolucionaria del período, carecía de una dirección correcta, era necesario aglutinar todo el potencial revolucionario existente.

Esa masa popular y revolucionaria, estaba compuesta por la pequeña burguesía y también por sectores humildes.

Pero fue precisamente en 1952, cuando irrumpió en la escena política, el fatídico golpe militar del 10 de marzo.

Fulgencio Batista, que se había alejado del poder en 1944 con una gran cantidad de millones de pesos, había dejado en los cuarteles el mismo ejército, que con incontables prebendas, lo había apoyado durante esos años.

Era el mismo ejército de la República, que habían creado los norteamericanos en la primera ocupación militar, el que encabezó el golpe de Estado.

El gobierno de turno desmoralizado, le resultó fácil de derrocar a Batista. Compuesto por malversadores, huyeron sin la menor resistencia, abandonando al pueblo a su suerte.

Los problemas sociales del país se habían visto agravados, como resultado del crecimiento de la población y el subdesarrollo.

Los partidos y líderes tradicionales eran incapaces de organizar una resistencia fuerte, que pudiera enfrentar a la dictadura militar reaccionaria.

Se habían producido divisiones y fricciones en el movimiento revolucionario, fundamentalmente por divergencias en las formas de lucha.

Más de seiscientos mil desempleados constituían la reserva laboral, la clase obrera era explotada, los males del analfabetismo, la insalubridad, la miseria, el juego, los vicios y los abusos, se imponían por todas partes.

El imperialismo dominaba la política nacional. El Partido Marxista-Leninista por sí solo, no contaba con medios, fuerzas, ni condiciones para llevar a cabo una insurrección armada.

Las condiciones objetivas para una Revolución, sí estaban dadas, había que valorar los factores subjetivos, y lograr una nueva estrategia revolucionaria.

Desde el triunfo de la Revolución de Octubre de 1917, hasta la lucha contra el fascismo en la década del 40, había comenzado a gestarse una conciencia política, en algunos sectores de la sociedad cubana de la época. Una generación de jóvenes revolucionarios, influidos por los libros, la literatura y por los acontecimientos históricos, interpretaron y aplicaron a las condiciones específicas del país, la doctrina de Marx, Engels y Lenin.

Adaptar a las características de Cuba la mezcla de sentimientos patrióticos, democráticos y progresistas, de pureza política, desinterés y abnegación, que existían en la totalidad de los que integraban la vanguardia revolucionaria.

En vísperas del asalto al Cuartel Moncada, el 26 de julio de 1953, las condiciones sociales, económicas y políticas del país eran desastrosas. Así nacía el nuevo proceso revolucionario.

El Asalto al Cuartel Moncada no significó el triunfo de la Revolución Cubana en ese momento, pero trazó el programa de liberación nacional que contribuiría a la victoria definitiva del 1ro de enero de 1959. Sin el Moncada, no habría existido el Granma, la lucha en la Sierra Maestra y el triunfo definitivo, como tampoco habría historia revolucionaria sin las gestas independentistas del 1868 y del 1895, que mantuvieron en alto el sentimiento nacionalista y patriótico.

Después de 92 años del Grito de La Demajagua en 1868, Cuba era al fin dueña absoluta de su destino, no se había frustrado la Revolución.

En esta obra no sólo estuvo presente el Movimiento 26 de julio, también contribuyeron a ella el Partido Marxista-Leninista, que agrupaba a lo mejor de la clase obrera; y los combatientes del Directorio Revolucionario, que protagonizaron episodios heroicos, como el Ataque al Palacio Presidencial el 13 de marzo de 1957, y que participaron además, en la lucha insurreccional. Trabajadores, estudiantes y pueblo unidos fueron los protagonistas de esta epopeya.

Comenzaba una etapa completamente nueva en la historia de la patria, llegaba el momento de cumplir las promesas del Moncada.

PRIMERAS MEDIDAS TOMADAS POR LA REVOLUCIÓN EN EL PODER

Entre las primeras medidas de la Revolución, se procedió a castigar a los principales responsables de los crímenes y torturas cometidos por la tiranía batistiana. Muchos de los criminales lograron refugiarse en los Estados Unidos, recibiendo asilo por parte de ese gobierno.

Se disolvió el viejo ejército que había reprimido al pueblo, asumiendo la función correspondiente a las Fuerzas Armadas, el Ejército Rebelde, que era en esencia, el pueblo uniformado.

La administración pública fue saneada de elementos que habían sido cómplices de la tiranía.

Se erradicó la malversación de fondos públicos, las prebendas y la funesta práctica del cobro de sueldos sin desempeñar el cargo.

Fueron disueltos los partidos políticos serviles.

Fue eliminada la dirección corrompida y entreguista de los sindicatos, reestableciéndose los derechos a los trabajadores.

Los obreros despedidos de sus centros de trabajo bajo la tiranía, fueron reintegrados en sus puestos

Comenzó todo un proceso de reestructuración de la esfera económica, social y política del país.

En el corto espacio de unos meses, la Revolución se enfrentó al desempleo, a las precarias condiciones de educación y de salud que existían. A las zonas rurales se enviaron miles de maestros y se comenzaron a construir hospitales en los lugares más recónditos de los campos.

El juego, el tráfico de drogas y la prostitución, fueron erradicados.

Fueron desapareciendo la mendicidad, los niños abandonados y descalzos pidiendo limosnas por las calles a los cuales se les ofreció posibilidades de estudio.

El suministro de agua potable para el pueblo logró a partir de la Revolución, una mejoría sustancial. No sólo se creó infraestructura para el abastecimiento de agua a la población, sino para el desarrollo económico del país, las obras hidráulicas crecieron, la agricultura también se convirtió en una prioridad.

Los medios de divulgación masiva, dejaron de ser propiedad de las empresas monopolistas.

AGRESIONES IMPERIALISTAS CONTRA LA REVOLUCIÓN CUBANA

Desde los primeros meses del triunfo de la Revolución, el imperialismo y la reacción, lanzaron una feroz campaña anticomunista, empleando a fondo esta arma, para confundir a las masas, y con el fin de dividir al pueblo.

En las condiciones de Cuba, el imperialismo no podía tolerar una Revolución Nacional Liberadora, y mucho menos Socialista.

También le preocupó en gran medida al imperialismo, el significado que tuvo la Revolución Cubana para el resto de los países de América Latina, era un ejemplo, que no podía permitir el círculo gobernante yanqui.

Desde el mismo instante, que Estados Unidos comprendió que la Revolución no retrocedería ni se plegaría a sus presiones e intereses, comenzó la cadena de agresiones económicas. Asimismo inició una intensa campaña anticubana y preparó mercenarios para invadir el territorio, concretándose con la Invasión de Playa Girón.

También trató de desestabilizar el país, con innumerables actos de sabotaje, apoyando militarmente a las bandas contrarrevolucionarias, y estimulando acciones piratas sobre el territorio y aguas jurisdiccionales cubanas, entre otros hechos, que incluían además preparar atentados a dirigentes de la revolución.

En el caso específico de las bandas contrarrevolucionarias fueron organizadas y financiadas por la Agencia Central de Inteligencia (CIA), apoyada en los terratenientes y burgueses nacionales, sobre todo en las montañas de la Sierra del Escambray.

El pueblo unido, uniformado, agrupado en milicias revolucionarias, junto a los combatientes del Ejército Rebelde y las organizaciones políticas y de masas ya creadas, logró destruir cada una de las maniobras del imperialismo y la reacción haciéndoles frente heroicamente a costa de valiosas vidas.

En el terreno económico, gestó golpes contundentes a la economía del país. Estados Unidos suprimió la importación de la cuota azucarera cubana, repartiéndola entre otros países de América Latina.

La mayoría de los escasos centros industriales que existían en Cuba, estaban equipados con maquinarias de ese país, industria eléctrica, refinerías de petróleo, las minas, los talleres textiles, la industria alimenticia, el transporte, las fábricas, entre otros.

Eliminó de modo absoluto la exportación de piezas de repuesto a Cuba, no sólo por parte de su industria interna, sino también de sus numerosas subsidiarias en todo el mundo.

Suprimió la venta de combustible del cual era nuestro principal suministrador, y refinador .

Se sumaron las prohibiciones de tipo comercial incluidos alimentos y medicinas.

Estas medidas de bloqueo, fueron acatadas por las subsidiarias norteamericanas y por los gobiernos de muchos de esos países donde estaban radicadas.

AGRESIONES BIOLÓGICAS CONTRA CUBA

Desde finales de 1961 y durante 1962 la CIA organizó la Operación Mongoose, que tenía el objetivo de derrocar la Revolución Cubana, e incluía para lograrlo un plan que pretendía incapacitar a los trabajadores azucareros durante la zafra, mediante el empleo de medios químicos destinados a enfermarlos y mantenerlos alejados del trabajo afectando la producción de su principal industria.

El 29 de mayo de 1964 globos de diversos tamaños fueron lanzados desde una gran altura, y se disolvieron al contacto con la tierra dejando una sustancia gelatinosa, similar a la utilizada en caldos de cultivos de bacterias.

En 1971, el diario Newsday de Long Island, reveló que un virus procedente del Fort Gulik, en la zona del Canal de Panamá, había sido llevado por un barco pesquero a agentes que operaban contra Cuba.

En el libro The Fish is Red, se ratificaba que agentes de la CIA habían introducido en Cuba por primera vez en 1972, el virus de la fiebre porcina como consecuencia del cual más de medio millón de cerdos fueron sacrificados para combatir la epidemia.

Entre 1979 y 1981 se introdujeron cuatro destructivas plagas que afectaron seriamente a personas y cultivos vitales para la economía cubana: el dengue hemorrágico y la conjuntivitis hemorrágica, la roya de la caña de azúcar y el moho azul del tabaco. Sólo el dengue hemorrágico que contaminó a miles de personas dejó un saldo de 158 muertos, de ellos 101 niños. En sus primeras siete semanas afectó a 273 404 personas.

En 1979 el diario The Washington Post informaba que la CIA tenía un programa contra la agricultura cubana y que desde 1962 los especialistas del pentágono fabricaban agentes biológicos para estos fines.

En 1984 y ante un jurado norteamericano, Eduardo Arocena, líder del grupo terrorista Omega-7, reconoció haber participado en una operación para introducir gérmenes como parte de la guerra biológica contra Cuba.

LA AGRESIÓN IDEOLÓGICA Y CULTURAL DE LOS ESTADOS UNIDOS HACIA CUBA

Desde inicios de siglo, los Estados Unidos mantuvieron latente sus intenciones de penetración ideológica y cultural hacia el territorio cubano. Fueron variadas las formas de influencia ejercida, desde introducir el llamado modo de vida norteamericano, y su política consumista, hasta el empleo desproporcionado de transmisiones radiales y televisivas donde prevalecían sus manifestaciones culturales, publicaciones y ediciones de propósitos «plattistas».

Al triunfar la Revolución Cubana, esta penetración tomó formas más acabadas y agresivas. Su política comenzó a instrumentarse y estimularse, incorporando fines subversivos.

Estados Unidos comenzó reiteradamente a violar el espacio radioeléctrico nacional. Ya en mayo de 1960 la FCC (Comisión Federal de Comunicaciones) autorizaba transmisiones por onda corta hacia Cuba.

Por parte de la CIA se promovió el montaje de la estación conocida con el nombre de Radio Swan, en el Mar Caribe. Y es el 21 de marzo de 1960, que se unen en ese empeño, a la conocida  “La voz de los Estados Unidos de América” .

A partir de 1960 fueron incontables las horas de transmisiones hacia Cuba. Con el objetivo definido de desacreditar y desestabilizar el país surgieron Radio Mambí, La Cubanísima, Radio Swan, Radio Fé, Radio Martí, emisiones a través de programas de la CMQ y la emisora WQBA, entre muchas otras procedentes de Miami.

No se trata de libre flujo de información entre los pueblos ni mucho menos. Atendiendo al comportamiento de las transmisiones de radio y de televisión desde Estados Unidos hacia Cuba, y los análisis realizados por especialistas e investigadores del tema, se llegó a las siguientes conclusiones:

– La cuestión de la agresión radial de Estados Unidos contra Cuba, es otra cosa. No se debate acerca de la libertad de información o la libre circulación de las ideas, es un debate en torno a la soberanía de Cuba.

– Las transmisiones radiales y de televisión de Estados Unidos hacia Cuba, son un recurso político y, por su diseño y utilización, son un instrumento de agresión. Se consideran ilegítimas porque se diseñan especialmente contra Cuba.

– Según el Reglamento Internacional de Telecomunicaciones, en esta zona las frecuencias de ondas medias no deben ser utilizadas para transmisiones internacionales, y menos el contenido de su programación estar encaminado a la abierta promoción de la subversión, la violencia, la violación de las leyes, e incluso, el asesinato político.

– Son inmorales y ajenas a toda ética, porque su programación es incompatible con el espíritu de la legislación internacional, que concibe las comunicaciones como un vehículo para reforzar los vínculos entre los pueblos y difundir la cultura y la colaboración.

– Respecto a la agresión a través de la televisión, Estados Unidos se ha colocado en posición de delincuente internacional, al violar la prohibición que expresa el Reglamento de telecomunicaciones, se apoderaron de hecho de un canal registrado para la transmisión de la TV cubana, por la fuerza, sin consentimiento de la contraparte cubana.

– En Cuba existe una aceptable audiencia respecto a transmisiones de radio desde distintos puntos del planeta, como son; de Radio Francia, la BBC de Londres, Radio Nedherland, La Voz de Israel, Radio España, La Voz de los Estados Unidos y otras, pero no son exactamente lo mismo que las creadas en el propio territorio de Estados Unidos, con el fin de agredir a Cuba, entre las que figuran en primer orden la Radio y la TV Martí. Sólo la llamada Radio Martí, utiliza 18 frecuencias de onda corta, tres de onda media y una de FM contra el país.

– Las autoridades de telecomunicaciones de los Estados Unidos van más allá en su ilegalidad respecto a Cuba, cuando toleran que plantas comerciales del Sur de La Florida, empleen patrones de antena y transmisores de una potencia superior a la necesaria para las transmisiones locales, aceptan que plantas de onda corta, (denominadas piratas) trasmitan sin licencia, desde su territorio, invadan frecuencias destinadas al servicio de radioaficionados, tareas de la defensa civil, comunicaciones entre naves y aeronaves, y cometan otras arbitrariedades.

Cuba no tomó medidas contra decenas de plantas internacionales que penetran su espectro radioeléctrico, no actúa contra el elevado número de emisoras de México, Centro y Sur América, e incluso de Estados Unidos, que por su propagación, sin pretenderlo, son escuchadas en el país, ni incluso contra “La Voz de los Estados Unidos de América” . Pero sí se actúa contra aquellas que laceran la soberanía e independencia, este diferendo no se relaciona con la libertad de información.

Se consideran ilegales todas las transmisiones en el interior de la Base Naval de Guantánamo, debido a que en 1903 cuando se estableció la base, no existía la radio ni la televisión, por lo que no fue negociado. Tampoco se alude a ello en el Tratado de Relaciones de 1934 entre Cuba y los Estados Unidos.

Sin embargo, desde los años 50, los norteamericanos comenzaron a inscribir en el Registro Internacional, las frecuencias utilizadas en la base.

En 1980, durante la Conferencia de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), Cuba denunció el empleo de estos servicios sobre la base del Reglamento que establece entre otros aspectos que toda notificación de asignación de frecuencia a una estación, debe ser hecha por la administración del país, en cuyo territorio está situada la estación.

Cuba ha estado sometida a un auténtico bombardeo radial y televisivo, que ha ascendido a 1 700 horas semanales de mensaje subversivo y anticubano, a través de más de 30 frecuencias.

POLÍTICA

Desde el mismo 1ero. de enero de 1959, comenzaron a efectuarse en el país profundas transformaciones en su estructura política.

El sistema de gobierno estaba conformado de manera tal, que los intereses de la clase dominante, la burguesía, estaban garantizados. Era necesario romper con esa vieja estructura y crear un estado donde las necesidades de la mayoría fueran prioritarias para sus gobernantes, un estado donde la soberanía e independencia nacional fueran reales.

ASAMBLEA NACIONAL DEL PODER POPULAR

Es el órgano supremo del Poder Popular y del Estado. Representa y expresa la voluntad soberana de todo el pueblo. Es el único que posee potestad constituyente y legislativa en la República.

Entre sus atribuciones se encuentran:

a) Acordar reformas a la Constitución, conforme a lo establecido en el artículo 141.

b) Aprobar, modificar o derogar las leyes y someterlas previamente a la consulta popular, cuando lo estime procedente, teniendo en cuenta la legislación de que se trate.

c) Decidir acerca de la constitucionalidad de las leyes, decretos-leyes, decretos, y demás disposiciones generales.

ch) Revocar en todo o en parte, los decretos-leyes que haya dictado el Consejo de Estado.

d) Discutir y aprobar los planes nacionales de desarrollo económico y social.

e) Discutir y aprobar el presupuesto del Estado.

f) Aprobar los principios del sistema de planificación de la economía nacional.

g) Acordar el sistema monetario y crediticio.

h) Aprobar los lineamientos generales de la política exterior e interior.

i) Declarar el Estado de Guerra, en caso de agresión militar y aprobar los tratados de paz.

j) Establecer y modificar la división político-administrativa del país.

k) Elegir al Presidente, Vicepresidente y al Secretario de la Asamblea Nacional.

l) Elegir al Presidente, al Primer Vicepresidente, a los Vicepresidentes, al Secretario, y a los demás miembros del Consejo de Estado.

ll) Designar, a propuesta del Presidente del Consejo de Estado, al Primer Vicepresidente, a los Vicepresidentes y demás miembros del Consejo de Ministros.

m) Elegir al Presidente, al Vicepresidente y a los demás jueces del Tribunal Supremo Popular.

n) Elegir al Fiscal General y a los Vicefiscales Generales de la República.

ñ) Nombrar comisiones permanentes y temporales.

o) Revocar la elección o designación de las personas elegidas o designadas por ella.

p) Ejercer la más alta fiscalización sobre los órganos del Estado y el Gobierno.

q) Conocer, evaluar y adoptar las decisiones pertinentes sobre los informes de rendición de cuentas que le presenten al Consejo de Estado, al Consejo de Ministros, al Tribunal Supremo, la Fiscalía General de la República y las Asambleas Provinciales.

r) Concede amnistías.

s) Dispone la convocatoria de referendos, en los casos previstos en la Constitución y en otros que la propia Asamblea considere procedentes.

La Asamblea Nacional está compuesta por diputados elegidos en las Asambleas Municipales en la forma y en la proporción que determina la ley.

Después de elegidos los diputados a la Asamblea, ésta se reúne por derecho propio, bajo la presidencia del diputado de más edad y asistido, como secretarios, por los dos diputados más jóvenes.

Es en esa sección que se verifica la validez de la elección de los diputados, y éstos prestan juramento y eligen al Presidente, al Vicepresidente y al Secretario de la Asamblea Nacional, los que toman posesión de inmediato de sus cargos.

La Asamblea Nacional se reúne en dos períodos ordinarios de sesiones al año y en sesión extraordinaria, cuando lo solicite la tercera parte de sus miembros o la convoque el Consejo de Estado. También las leyes y acuerdos de la Asamblea Nacional, salvo cuando se refieran a la reforma de la Constitución, se adoptan por mayoría simple de votos.

Sus sesiones son públicas, excepto en el caso en que la propia Asamblea acuerde celebrarlas a puertas cerradas por razones de interés de Estado.

La Asamblea Nacional es elegida por un término de cinco años. Este término sólo podrá extenderse por acuerdo de la propia Asamblea, en caso de guerra, o en virtud de otras circunstancias excepcionales que impidan la celebración normal de las elecciones, y mientras subsistan tales circunstancias. La Asamblea cuenta con un reglamento para cada instancia.

Existen las asambleas locales, que están compuestas por los delegados del Poder Popular, constituidas en las demarcaciones político-administrativas en que, conforme a la ley, se divide el territorio nacional. Ellos constituyen los órganos superiores locales del poder del Estado.

Estas asambleas están investidas de la más alta autoridad para el ejercicio de las funciones estatales en sus respectivas demarcaciones. Para ello, en cuanto les concierne ejercen gobierno y, a través de los órganos que constituyen, dirigen entidades económicas de producción y de servicios, que les están directamente subordinadas y desarrollan las actividades requeridas para satisfacer las necesidades asistenciales, económicas, culturales, educacionales y recreativas, de la colectividad del territorio a que se extiende la jurisdicción de cada una.

En la medida que les corresponde y conforme a la ley, participan en la elaboración y posterior ejecución y control del Plan Único de Desarrollo Económico-Social, que adopte el Estado.

También cumplen y hacen cumplir las leyes y disposiciones de carácter general, que emanen de los órganos superiores del Estado. Adoptan acuerdos y dictan disposiciones. Eligen a su Comité Ejecutivo y determinan la organización, funcionamiento y tareas de éste conforme a la ley. Revocan el mandato de los miembros de los respectivos Comités Ejecutivos. Forman y disuelven comisiones de trabajo, entre otras atribuciones de las asambleas locales.

Las Asambleas Municipales eligen, a través del voto secreto, a los delegados a las Asambleas Provinciales.

Las demás asambleas locales, se constituyen en la misma forma y en la oportunidad que señala la ley.

Las asambleas locales, requieren para su validez, la presencia de más de la mitad del número total de sus integrantes. Sus acuerdos se adoptan por mayoría simple de votos.

Las asambleas se renuevan, periódicamente, cada dos años y medio, que es el término de duración del mandato de los delegados. Este término solo podrá extenderse por decisión de la Asamblea Nacional.

CONSEJO DE ESTADO

Es el órgano de la Asamblea Nacional que la representa entre uno y otro período de sesiones, ejecuta los acuerdos de ésta y cumple las demás funciones que la Constitución le atribuye.

A los fines nacionales e internacionales, ostenta la suprema representación del Estado Cubano.

CONSEJO DE MINISTROS

Es el máximo órgano ejecutivo y administrativo y constituye el Gobierno de la República

CONSTITUCIÓN

Con el triunfo Revolucionario el Estado Cubano asumió una estructura provisional. Paulatinamente se comenzaron a crear instituciones sólidas, que respondieran a las necesidades del país, hasta tanto la madurez y experiencia de ese proceso, permitieran cumplir a cabalidad la adopción de una constitución, que sustituyera la antigua de 1940, que con incontables modificaciones, había regido hasta ese momento.

Se necesitaba una constitución en correspondencia con la nueva sociedad cubana, donde la conciencia social e ideología, reflejaran las profundas transformaciones económicas, sociales y políticas, operadas por la Revolución.

El proyecto de la Constitución fue discutido por el pueblo, agrupado en las organizaciones de masas y políticas; los sindicatos, los CDR, la FMC, la ANAP, la FEU, la FEEM, el PCC, las unidades militares y las misiones cubanas en el exterior. Finalmente, fue sometido a Referendo Popular, el 15 de febrero de 1975, para su ratificación definitiva.

La Constitución Socialista fue proclamada solemnemente, el 24 de febrero de 1975.

Entre los aspectos fundamentales contemplados se encontraban:

-El derecho al trabajo para todos por igual.

-El derecho de los campesinos a la tierra..

-El derecho a la enseñanza gratuita y científica.

-El derecho de todo enfermo a la asistencia médica y hospitalaria gratuita.

-El derecho a la educación física, el deporte y la recreación.

-El derecho al descanso y a las vacaciones retribuidas para todos los trabajadores.

-El derecho a recibir la protección de la seguridad social.

-El derecho de la mujer trabajadora a las vacaciones retribuidas de maternidad, que garanticen un parto sano y la atención al recién nacido.

-El derecho de la mujer a la igualdad social y familiar.

-El derecho de todos los ciudadanos, independientemente del color de su piel u origen nacional, a la plena igualdad.

-El derecho de los ciudadanos a organizarse en sindicatos, en comités, asociaciones campesinas, de mujeres, de estudiantes, de escritores y artistas, profesionales, científicos, deportistas y otros.

-El derecho de los ciudadanos, incluidos los jóvenes desde los 16 años, las mujeres y los miembros de los institutos armados, a participar en la vida política del país y ejercer el voto libre, universal y secreto en las elecciones, y revocar con su voto, a los electos por ellos.

En la Constitución se definía el deber de todos los cubanos de respetar sus enunciados y servir en la defensa de la patria. También se enunciaban los principios de la política exterior del país y se sustentaban las bases de la legalidad socialista.

Las legislaciones, reglamentos y el ordenamiento jurídico en general, se ajustaron a las normas más importantes impuestas por la Constitución.

DIVISIÓN POLÍTICO-ADMINISTRATIVA

En 1959, se mantenía la división político-administrativa establecida por el régimen colonial español. La misma se caracterizaba por sus arbitrariedades, y no tenía en cuenta las realidades geográficas, económicas y sociales del país. Desde 1878 la isla se dividía en seis provincias y 126 municipios.

En 1963 las transformaciones originadas, elevaron el papel y la autoridad de las provincias. En este mismo año se crearon las regiones, como eslabón intermedio entre aquellas y los municipios.

En 1973 ya existían 58 regiones territoriales y 407 municipios y seccionales. Sin embargo, los cambios y las exigencias del desarrollo económico y social del país, así como el perfeccionamiento de las instituciones del Estado, provocaron que esa estructura dejara de ser racional y funcional. Se realizaron amplios estudios con fundamento científico, que permitieron una correcta división político-administrativa, teniendo en cuenta las realidades geográficas del país, la distribución de la población, la actividad económica y sus perspectivas de desarrollo, las tradiciones entre las diferentes localidades, las redes viales existentes y también las migraciones, entre otros factores.

En la provincia de Matanzas se llevó a cabo una valiosa experiencia, la constitución de los órganos de Poder Popular.

Los resultados positivos alcanzados en Matanzas, trajeron consigo la generalización de la experiencia a todo el país. Este proceso incluía el aumento de las funciones y facultades de las provincias y municipios, que se encargaron, a partir de ese momento, de la administración de miles de unidades, atendidas por los organismos centrales del Estado.

Fue necesario crear, en las nuevas instancias territoriales, las condiciones idóneas para facilitar la planificación y administración de las actividades económicas y sociales.

Se redujo el número de municipios, ajustándose a un criterio de relativa uniformidad en cuanto a área, población, actividades productivas, servicios, comunicaciones y otros aspectos.

El resultado de esta reestructuración concluyó con una división político-administrativa, formada por 14 provincias y un municipio especial. Las provincias creadas fueron:

1- Pinar del Río.
2- La Habana.
3- Ciudad de La Habana.
4- Matanzas.
5- Villa Clara.
6- Cienfuegos.
7- Sancti Spíritus.
8- Ciego de Avila.
9- Camagüey.
10- La Tunas.
11- Holguín.
12- Granma.
13- Santiago de Cuba.
14- Guantánamo.

El municipio que contó con la categoría de especial, fue Isla de la Juventud.

ELECCIONES DEL PODER POPULAR

En el país este proceso se desarrolla con el apoyo de las organizaciones de masas. Los pasos fundamentales en los cuales se sustenta el mismo, se describen a continuación:

a) Elecciones Generales: En éstas se renuevan todos los órganos del Poder Popular. Se elige a los diputados a la Asamblea Nacional del Poder Popular, a su Presidente, vicepresidente, Secretario y al Consejo de Estado; a los delegados a las Asambleas Provinciales y Municipales del Poder Popular, y a sus Comités Ejecutivos. Estas elecciones se celebran cada cinco años.

b) Elecciones de Órganos Locales: Se elige a los delegados a las Asambleas Provinciales y Municipales del Poder Popular y sus Comités Ejecutivos. Estas elecciones se celebran cada dos años y seis meses.

c) Elecciones Especiales: Se realizan para cubrir los cargos vacantes, por cesar en sus funciones diputados a la Asamblea Nacional o delegados a las Asambleas Provinciales o Municipales del Poder Popular. Estas elecciones se celebran cuando se producen tales vacantes.

La amplia participación popular caracteriza nuestras elecciones. El pueblo es quien postula y elige al candidato más capaz, en las Asambleas a nivel de circunscripción.

ORGANIZACIONES DE MASAS, POLÍTICAS Y SOCIALES

A partir del triunfo revolucionario, surgieron gran cantidad de organizaciones políticas, de masas y sociales que han tenido una gran importancia en la vida económica, política y social del país. A continuación las mencionamos:

RELACIONES EXTERIORES

Hasta el año 1959, el país tenía diseñada sus relaciones internacionales, en concordancia con los estrechos vínculos existentes entre el gobierno de la República y el de los Estados Unidos. Debe tenerse en cuenta que la isla dependía económica y políticamente en un alto por ciento, de los intereses de las transnacionales y monopolios norteamericanos, dueños de los principales recursos del país.

Desde el mismo momento en que triunfó la Revolución Cubana, se hizo necesario definir la política exterior a seguir.

Desde ese momento siempre se ha caracterizado por valorar altamente nuestra independencia y soberanía, y por respetar, en esta misma medida, la de todos los países del mundo. La colaboración y solidaridad con las causas justas del mundo, también ha sido una premisa de nuestra política exterior.

Existen numerosos ejemplos de la ayuda que ha brindado Cuba en varias regiones del mundo, tanto en Asia, África, como en América Latina.

Contingentes de médicos, maestros, constructores, entrenadores deportivos, y muchos otros profesionales de diferentes esferas, han contribuido con su esfuerzo desinteresado, a mejorar las condiciones de vida y salud de muchos pobladores de esos lugares.

Esta política se ha mantenido a pesar de desarrollarse en un contexto difícil para el país, debido a la estrategia aislacionista que durante todos estos años ha tratado de imponer el gobierno de EE.UU. A ello se suma la escalada de agresiones continuas, que han ido desde cortar el suministro de combustible a la isla, en los primeros años de la década del 60, hasta las agresiones económicas, militares, y los planes de atentados a los dirigentes del país, entre otros.

En la política exterior de Cuba, está presente el principio de coexistencia pacífica a pesar de las diferencias ideológicas, establecido en el sistema de relaciones internacionales.

También Cuba es abanderada del principio de respeto a la autodeterminación y soberanía de los pueblos, sin distinción del régimen económico y social.

Un objetivo fundamental de la política exterior de Cuba, es hacer política exterior desde adentro, es decir, dar a conocer la realidad cubana a todo aquel que se interese por ella, desde el cuerpo diplomático acreditado en el país, hasta el turista o visitante procedente de cualquier país, que demuestre interés en igual sentido.

Todo cubano, independientemente de su profesión o cargo, que sale al exterior en función de alguna tarea o actividad inherente a su calificación, es parte activa de la política exterior, y representa la vivencia más directa de la realidad del país.

A pesar de los intentos por desprestigiar a Cuba, hemos ido ganando en reconocimiento internacional, muestra de ello han sido las cada vez más numerosas responsabilidades otorgadas, al frente de prestigiosas organizaciones e instituciones internacionales y la cada vez más larga lista de países que mantienen relaciones diplomáticas con la Isla.

Otro tanto sucede con las interesadas en establecer vínculos comerciales, culturales, educacionales, e incluso con afán por intercambiar experiencias en esferas como la salud pública, el deporte, etc.

SISTEMA JUDICIAL

Unas de las primeras medidas que tomó la Revolución en este sector fueron, disolver los llamados Tribunales de Urgencia, los juicios faltos de garantías, así como la depuración de la Judicatura de servidores de la tiranía, y de elementos corruptos.

Se organizaron los tribunales revolucionarios que se encargarían de juzgar a los criminales de guerra, torturadores y asesinos.

En 1963 se crearon los tribunales populares, encargados de juzgar delitos, cuya sanción prevista no excediera los180 días de arresto. Estos tribunales estaban integrados, por jueces elegidos en asambleas de masas.

En 1973 se aprobó la Ley de Organización del Sistema Judicial, luego que el proyecto correspondiente, fuera sometido a discusión pública y popular.

Esta Ley creó el sistema único de tribunales en todo el país, regidos por el Tribunal Supremo Popular. Los tribunales de carácter colegiado, se componían de jueces profesionales y jueces legos, electivos todos, renovables periódicamente, responsables y revocables. Todos los fallos judiciales eran, a partir de ese momento, recurribles ante la instancia inmediata superior.

La nueva Fiscalía tendría como función primordial la vigilancia de la rigurosa observancia de la legalidad socialista, no sólo en los tribunales, sino también, en la actividad de los órganos estatales.

La Ley reconocía en los Bufetes Colectivos una organización autónoma de interés social, a la cual debían pertenecer los abogados para ejercer ante los tribunales. Así se fue organizando un sistema judicial coherente, democrático, y vinculado a las masas, cuyo fin esencial perseguía, la elevación de la conciencia jurídica social.

El Ministerio de Justicia, fue perfeccionando su labor de asesoramiento a los órganos superiores del Estado, y de contribución eminente a la elaboración de textos jurídicos fundamentales.

Con el incremento de los estudios de nivel superior en Ciencias Jurídicas, los cursos de capacitación del personal en los diferentes niveles, fue acrecentando el papel a desempeñar por los juristas en la sociedad.

Se creó la Asociación Nacional de Juristas, que ha contribuido, durante todos estos años, a la superación profesional de sus miembros. Posteriormente, se consolidaron las estructuras organizativas territoriales, que abarcaron desde las instancias superiores del tribunal supremo, hasta las provinciales y municipales.

El perfeccionamiento de la actividad jurídica en el país, y del Sistema Judicial, así como sus objetivos de justicia social, han sido una constante del gobierno revolucionario,

Además de la Ley de Organización del Sistema Judicial, se elaboraron y discutieron otras legislaciones, como la de Procedimiento Penal, la de Procedimiento Civil y Administrativo, el Código de Familia y otros.